top of page

El dulce beso del miedo irracional


El miedo es una de las emociones consustanciales al ser humano. Es decir, nacemos con esta emoción y ello por una simple finalidad: protección.


Sin miedo tal vez ya habríamos muerto, ya que nos expondríamos a muchos riesgos innecesarios.


El miedo es una emoción muy poderosa, ya que su intensidad nos puede paralizar o alejarnos de algo que queremos.


Si bien su función es de protegernos de los peligros que nos pueden hacer daño, la intensidad con la que nos visita, muchas veces termina perjudicando nuestros intereses.


En lugar de hacernos bien protegiéndonos, nos hacen mal, limitándonos.


Por ello hay que diferenciar los 2 tipos de miedo : los racionales y los irracionales.


Los racionales son buenos, son los que nos protegen de peligros reales : al fuego, a una persona con una pistola, a entrar en barrio peligroso, a los animales peligrosos, a caer de un lugar muy alto, etc.


Estos miedos están bien, hay que hacerles caso pues nos protegen de peligros reales y gracias a ellos aún estamos vivos.


Cuando dicen “supera tus miedos” no se refieren a estos. No. A estos miedos es preferible hacerles caso.



Pero también están los miedos irracionales, que no nos protegen de peligros reales, solo de ideas creadas en la cabeza. Solo son paradigmas, creencias a las que nos aferramos con pasión.


Los miedos irracionales son tóxicos, creados por nuestra falta de seguridad como por ejemplo :


Al que dirán, al rechazo, al fracaso, a la incertidumbre, a ser juzgados, a ser dañados emocionalmente, etc.


Estos miedos no nos protegen, solo nos limitan de oportunidades que tal vez nos sean beneficiosas.


Hablar en público es algo que nos conviene, pero solemos rechazarlo.


Decirle a una persona que te nos gusta puede darnos mucha alegría, pero tenemos más miedo del no, que motivación por buscar el sí.


Decirle a alguien que deje de hacer algo que nos molesta nos daría paz y calma, marcaríamos nuestros límites y nos haríamos respetar. Pero preferimos callar, porque tenemos miedo de que la persona se ofenda y le caigamos mal.


A veces no le cobramos a ese amigo que nos debe dinero, porque tenemos miedo que se ofenda.


Tenemos miedo de dar nuestra opinión, de expresar nuestro desacuerdo.



En fin, en la sociedad actual en la que ya no hay los peligros que habían antes, como los animales salvajes, la mayoría de miedos que tenemos, son miedos irracionales.


Nos ponemos excusas para no hacer lo que nos conviene hacer, como asumir mayor responsabilidad en el trabajo, invertir dinero en un negocio, buscar nuevas formas de hacer las cosas, intentar buscar lo que queremos una vez más, etc.


Toda excusa, es la manifestación de un miedo irracional, tal vez invisible, que ya ha estado con nosotros tanto tiempo, que no nos damos cuenta.


Los miedos invisibles son los peores, puesto que no podemos gestionar algo que no sabemos que existe. Podemos controlar aquello de lo que somos conscientes, pero todo lo que no somos conscientes nos controla.


Cuando normalizamos un miedo, nos acostumbramos a su presencia y pasa desapercibido para nosotros. De esta forma somos controlados por él.


No vas a luchar contra algo que niegas o que no sabes que existe.


Si les sigues haciendo caso a este tipo de miedos, te seguirás limitando.



Cuando escuchas decir supera tus miedos, se refieren a estos miedos irracionales.


Por ello es importante en trabajar en nuestra consciencia, pues así evidenciaremos muchos miedos que pasamos por alto y podremos utilizar herramientas de coaching y PNL para neutralizar el poder que esos miedos tienen sobre nosotros.


Con nuestros cursos podrás conocerte y gestionarte para que rompas esas barreras mentales que te mantienen del mismo tamaño y que tal vez no sepas que las tienes.


Sin consciencia, no hay paraíso.

bottom of page